Estudiantes levantan Chile

Más de 120 estudiantes universitarios y de colegios, organizados a través de clubes y centros de la Obra, recogieron escombros de casas derrumbadas por el terremoto que azotó al país la madrugada del domingo 27 de febrero.

Alumnos recogiendo escombros de una Iglesia.

El martes 1 de marzo, a las 9.30 am., los jóvenes dejaron atrás las vacaciones para ayudar a quienes han perdido todo tras el terremoto. Divididos en grupos, llegaron hasta las comunas de Cerro Navia y Buin a dar apoyo a las familias, limpiando casas y levantando escombros.

Cristóbal Aguilera, estudiante de Derecho de la Universidad de los Andes y uno de los organizadores del grupo de ayuda, comentó que el trabajo de los jóvenes fue muy bueno e intenso. Estuvieron entre las 10 am. y las 19 pm. recogiendo los restos de las casas derrumbadas y de una iglesia que estaba en vías de ser declarada Patrimonio Nacional. “Yo sentía que tenía la obligación de ayudar. A mis amigos de la universidad no les había pasado nada y esto nos serviría para agradecer lo que tenemos y darnos cuenta de la realidad de quienes hoy están sufriendo. Esto nos hace crecer humanamente”, aseguró. 

La coordinación de la asistencia médica que recibieron los pobladores de Cerro Navia, estuvo a cargo de un grupo de 17 personas, entre ellos, Felipe Izquierdo, estudiante de Ingeniería Comercial de la Pontificia Universidad Católica, desde el Centro Cultural Alameda. Médicos de tres especialidades: cardiólogo, siquiatra y pediatra, atendieron a unas 35 personas. Según Izquierdo, “las principales consultas eran por nerviosismo y sensación de inseguridad. Yo recibí a los pacientes, les conversaba mientras esperaban su turno y les daba una estampa de San Josemaría o un tríptico con su imagen. Me llamó la atención lo felices que se ponían. Todo lo que fuera ayuda humana y sobrenatural, lo recibían contentos”. 

Estudiantes trabajando para limpiar los daños dejados por el terremoto.

Otros alumnos como Diego Errázuriz y Jaime Phillips, ambos de la Universidad Católica, trabajaron en la recolección de escombros y levantamiento de muebles de casas. “Mientras ayudábamos, conversamos con la gente llamándolas a la calma y dándoles ánimo para luchar y levantarse, tratando de entregarles una visión cristiana de este desastre”, contó Errázuriz. 

Para Jaime Phillips, fue impactante ver tantas familias en la calle, sin sus casas, durmiendo a la intemperie. “Intentamos ayudar para que puedan reconstruir sus casas lo antes posible”.

 

Para ayudar:

Fundación CasaBásica

Banco Security.

Cuenta Corriente: E-0844861-01,

Rut: 65.725.900-4   

SWIFT CODE:     BSCLCLRM

Santiago, Chile